¿Quién los entiende? Siguen suelte y suelte a los autores materiales -incluso confesos- del caso de los 43 de Ayotzinapa; sean de Los Rojos, los Guerreros Unidos o hasta de los Abarca. Y van a empezar a encarcelar a las autoridades a cargo del proceso, empezando con el exprocurador Murillo. Pero… Si las pruebas son sólidas, ¿por qué soltar a los responsables? Y si no lo son, ¿por qué acusar a las autoridades? Y si las acusaciones contra las autoridades son sólidas, ¿Por qué integraron mal el expediente e hicieron las detenciones? Una hipótesis: para quedar bien con Ya-Saben-Quién, persona que se comprometió a resolver el caso… pese a que el principal inculpado, el alcalde Abarca, fue postulado -y arropado por mucho tiempo como un inocente involucrado por dolo- por ese mismo personaje. Vaya lío. Garcí en El Financiero.