
Este fin de semana trascendió un video de Peña Nieto bailando en una boda en España, y se supo que ya recibió la «Visa Dorada»: esto es un permiso para residir en aquel país para inversionistas que llevan más de un millón de euros en efectivo o tienen propiedades valuadas en más de €500,000. La pregunta debería ser «¿de dónde?», si sus sueldos públicos como gobernador y presidente no alcanzarían esos montos. Pero como bien señala Rocha en la Jornada, hay otros servicios que pueden ajustar esas cifras. O, al menos, es lo que sugieren Iberdrola, OHL o REPSOL tras el sexenio peñista. ¡Pues en lugar de pedir perdón por la conquista, vayamos a conquistar España! Ya tenemos avanzada allá.