Veamos: la frase de enmedio es un albur, que el maestro Alarcón en El Heraldo reinterpretó magistralmente para hacerla parecer menos alburera: la puntita del colmillo de todos modos chupa sangre (ya no digamos la otra puntita). El primer cuadro se refiere a que, según el presidente «ya se acabó la corrupción». Pero el 80% de los contratos fueron adjudicación directa. Y como respuesta a que Presidencia pagó más de un millón de pesos anuales -y hasta dos- a los «intelectuales orgánicos del régimen»: Estefanía Veloz, John Ackerman, Gibrán Ramírez y Lorenzo Meyer, su repuesta fue… que va a eliminar el INAI porque «es muy costoso». Claro que es costoso: le cuesta credibilidad y la opacidad es ideal para esconder la abundante corrupción que existe, pero se concentra en menos manos. Y el tercer cartucho… pues nada, que Hugo López-Gatell, el zar anti coronavirus que se la pasa recordándonos «Quédate en casa» fue fotografiado (en un restaurante, con ropa y sin cubrebocas) en Zipolite, la célebre playa nudista de Oaxaca con una acompañante femenina, a la que estaba tocándole la nalga. En fin, que algunos defensores dicen que «no es robot» y que «merece descanso». Sin duda: pero no en una playa cuando el mensaje ha sido «quédate en casa». Entre sus defensores, dicen que «ha hecho un magnífico trabajo», cuándo dijo que 60,000 muertos sería «catastrófico» y llevamos 128,000 o que «podría ganar cuatro o cinco veces más en otra parte, pero está al servicio de México y del presidente». Pues no: su incapacidad e inutilidad son patentes, así que este podrá ser su último trabajo en la vida… Aunque seguirá de mantenido: en cuánto se le acabe el manto presidencial de protección, podrá ser acusado hasta de genocidio o, por lo menos, de mala práctica médica. Por segunda vez: Calderón lo corrió por el desorden en el manejo de los datos de la pandemia de influenza AH1N1. Para que vean que ir a buenas escuelas no garantiza tu formación académica. En fin, tres frases para chamaquear y engañar a los bobos: «se acabó la corrupción», «nada más la puntita» y «quédate en casa». Más incongruencias de esta Transformación de Cuarta…