
Otra vez el político Hugo López-Gatell demostró que ya acabó con el epidemiólogo Hugo López-Gatell: al aparecer en la mañanera, señaló que «no es necesario hacer seguimiento del conteo de casos de Ómicron o de tomar medidas restrictivas adicionales, porque se trata de la misma pandemia» y que no se vacuna a los niños «siguiendo recomendaciones de la OMS». Y ayer la Jefa de Gobierno Claudia Sheinbaum anunció la cancelación de eventos de año nuevo -como ha sucedido en París, Nueva York, Londres y otras ciudades ante el repunte de casos- y la OMS insistió en que la vacunación, en especial de menores de edad, es importante para evitar que la nueva variante del COVID sea más grave. Cuándo las decisiones las toman los políticos y no los expertos, se llega a ese tipo de absurdos. Aunque sean la misma persona con dos roles. Horax en Milenio.