Pues al final la 4T va… a demostrarnos que «no somos iguales»: son peores que lo del pasado, por hipócritas. Mientras recibimos a los migrantes afganos que huyen del régimen del Talibán, este fin de semana agarramos a golpes a migrantes guatemaltecos y centroamericanos, al grado que uno de los agentes del Instituto Nacional de Migración pateó en la cabeza a una persona caída en el suelo y sometida con los escudos. Y el General Luis Rodríguez, titular de la Guardia Nacional ni declaró nada ni había tomado medidas disciplinarias. Tampoco SEGOB sobre el INM. Y en la CDMX, los granaderos -que ya no existen- que resguardaban el Congreso de la Ciudad, que tendría un periodo extraordinario para quitar facultades a los alcaldes y aprobar el presupuesto sin consultar a los alcaldes electos a quienes no ha recibido la Regenta -formalmente Jefa de Gobierno, pero en realidad más servil ante el presidente que cuándo había regentes legalmente sometidos al ejecutivo federal-, terminó en una golpiza en contra de los manifestantes al grado que le rompieron la nariz a la alcaldesa electa de Álvaro Obregón…. y luego dijeron que ella fue la que golpeó el escudo con la cara. Hipócritas y mentirosos, intolerantes y violentos… Pero la 4T va. Va hacia el basurero de la historia a pasos agigantados. Veamos si en las próximas horas corrigen o siguen de necios. Rictus en El Financiero.