Notable del ejercicio de diálogo de ayer, sumamente democrático, primero, que la autoridad se sentara con personas que fueron perjudicadas -así sea indirectamente- por sus decisiones, y los escuchara. Creo que el evento fue positivo. Segundo, escuchar las razones de por qué se toman las decisiones públicas en algo más que veinte segundos de soundbyte para la tele, fue ilustrativo. Tercero, que se transmitiera íntegro y en vivo (aunque se le pudo dar más difusión). Cuarto, como bien señala Perujo en El Economista, hubieron algunos acuerdos, así sean mínimos. Sólo falta que la Comisión de Seguimiento le siga para adelante y que en tres meses presenten resultados muy tangibles y positivos.