Con tantas versiones -y tan incongruentes- sobre el tema de la falta de medicinas para los niños con cáncer, solo hay claridad en una cosa: Hugo López Gatell es un genocida, cínico y corrupto y quienes le creen y hasta lo admiran son personas carentes de ética e incapaces de hacer lo correcto, de sentir empatía o de entender la gravedad de los problemas que causan. Pero… síganle, que más pronto que tarde -así sea al final del sexenio- al Doctor Muerte se le juzgará por todos sus errores y pagará por ello. Click sobre la imagen para agrandar.
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