La otra historia – Calderón

¿Y ahora de qué habla el cartón de Paco Calderón? Pues del cofundador de la Unión Social de Empresarios Mexicanos (USEM) y líder de la COPARMEX Jalisco, secuestrado, torturado y muerto hace 47 años. En un texto de El Informador, se lee lo siguiente; «Además de sus habilidades empresariales, Aranguren tenía un gran sentido social. Inspirado en el pensamiento de la doctrina social de la iglesia, la formación jesuítica y la de sus padres, Fernando introdujo en el mundo empresarial jalisciense temas que no eran tratados en forma amplia: la responsabilidad social de los empresarios, la participación de los obreros en las empresas, la capacitación, el bienestar y el bienser de los obreros.» ¿Y por qué Calderón lo recuerda? Pues porque Ignacio Olivares, el líder de la Liga Comunista 23 de Septiembre que planeó y ejecutó ese secuestro fue el mismo que introdujo a Jesús Piedra ibarra a la guerrilla, aunque en el comando de Nuevo León en lo que él operaba Occidente. Y ahora que recibió la medalla Belisario Domínguez su madre, Rosario Ibarra de Piedra, es justo recordar que, así como la desaparición de Jesús fue una violación de los derechos humanos y hasta un crimen de Estado, no era un mero líder social pacífico: era un guerrillero que cometió homicidios; sí muy «revolucionarios» pero homicidios al fin. Y ahora que el gobierno de la 4T anda pidiendo perdón por los delitos cometidos durante la «Guerra Sucia» de la década de 1970 -situación con la que estamos de acuerdo-, debería también recordar la otra hisotria, las de las víctimas de las guerrillas, y ofrecer compensación -así sea una disculpa pública- a sus familias. Porque casos como éste y el de Garza Sada queda claro que tuvieron algún tipo de aval y hasta de apoyo de la presidencia de Luis Echeverría. Click sobre la imagen para agrandar.