
La política hace extrañas combinaciones. Ahora el presidente presiona al Congreso de la Unión para que aprueben rápidamente que la Guardia Nacional pase a depender de la SEDENA. Lo que en los hechos marcaría una militarización de la seguridad pública por la vía legal. Uno de los principales opositores a la medida es el expresidente Felipe Calderón, quien en su momento militarizó la seguridad pública por la vía factual. Fuera de la ley, pues. Y su partido, el PAN, ataca el servilismo de MORENA… quienes no cantan mal las rancheras: aprobaron cambios a cuatro leyes para que la propuesta presidencial sea aprobada. ¿El detalle? Que ni siquiera pasaron 72 horas desde que los diputados recibieron la propuesta a que la aprobaron, sin pasar el proceso legislativo normal. Pero «no somos iguales». Resultaron peores. Hernández en La Jornada.