Versión corta de un escándalo de moda: La presidenta del congreso de Sonora, la petista (y antes panista) Diana Karina Barreras, se quedó sin candidatura en 2024. Pero su esposo, el entonces presidente de la Cámara de Diputados, Sergio Gutiérrez Luna, hizo un berrinche público y, pese a que era por otro partido, le dieron candidatura a la diputación federal. La tuitera Karla Estrella preguntó en la red X (antes Twitter) si no había obtenido esa candidatura por la intermediación del esposo. Y ya se sabe: usando las nuevas leyes tetra transformadas, se le exigió a Estrella que la indemnizara, que se le registrara en el padrón de agresores por violencia política de género, y que durante 30 días debía publicar en la red la sentencia. Con un matiz: para “evitar la revictimización de la afectada”, la sentencia debe ser en versión testada, por lo que Estrella le pide a dato protegido perdón por haber dicho que dato protegido obtuvo la candidatura por intervención de su esposo, dato protegido. .O sea, un ridículo mayor. Y que ha provocado todo tipo de burlas, memes, anécdotas y un linchamiento mediático como hacía mucho que no se veía. Y con algo de razón. Pues ya salió un ex jefe a decir que era inútil y conflictiva, sin talento legal alguno; una ex pareja que dice que la cambió por alguien “con más dinero” y que eso le dijo, que lo dejaba por pobre y que así llegó con su actual esposo; otro dice que entró al legislativo a sacar copias “y lo hacía mal”, que por eso la despidieron. Total, que ciertas o no, las historias en torno a dato protegido le están pasando una factura mucho más cara que lo que pudo afectarla un tuit, en forma de pregunta, de una cuenta de 18,000 seguidores… Aunque tenga que poner por 30 días “Te pido una disculpa, DATO PROTEGIDO, por el mensaje que estuvo cargado de violencia simbólica, psicológica, por interpósita persona, digital, mediática y análoga, así como de discriminación, basado en estereotipos de género. Esto perjudicó tus derechos político- electorales porque minimizó tus capacidades y trayectoria política”. Así, esa disculpa puede ser para cualquier persona. Y ya quedó como un bonito ejemplo de que la 4T censura, no aguanta la crítica… y es peor de lo que se dice de ellos. Chavo del Toro en El Economista.