
Curioso, muy curioso… Tras el artero asesinato de dos colaboradores de Clara Brugada, Ximena Guzmán, secretaria particular, y José Muñoz, asesor, ocurrieron dos cosas: desde la presidencia y en distintos niveles, le exigieron a la oposición “no politizar la tragedia”, en especial por decir que, dado que le tocó a alguien cercano al gobierno, en menos de 24 horas tenían ubicados los vehículos y a cuatro personas involucradas. Y, del otro lado, politizaron la tragedia: en el funeral de los funcionarios, las principales condolencias fueron… para Clara Brugada. “No nos robarán la utopía”, “dieron sus vidas en el combate por transformar la ciudad”, “¡No estás sola, no estás sola!”, mientras dejaban solos y desamparados a los familiares de las personas difuntas. Y lo peor es que dijeron eso los que politizaron desde la Guardería ABC hasta los 43 de Ayotzinapa, Aguas Blancas, Acteal y demás cosas que, según ellos, fueron represiones ordenadas directamente por los presidentes… Que ni enterados estaban de los hechos cuándo ocurrieron. De verdad que no es igual ser borracho que cantinero, como dice el refrán. Nuestras condolencias a los familiares de los difuntos. Horax en Milenio.