
Pues lo dicho: ya estará en marcha la elección de jueces y magistrados, y quien peor la está pasando es el INE. Porque nadie quiere participar, y el Instituto no se atreve a decir que esa cosa va a salir mal (y lo que sigue). Por eso, con algo de humor negro, Garcí en El Financiero propone una solución: reclutamiento “forzoso” de voluntarios. A ver si así…