Pues ante el arancel canadiense a productos americanos, ya subieron la apuesta al ponerle un arancel de 50 % al acero y automóviles importados a EE. UU. desde Canadá. Y la respuesta del país de la hoja de maple será cortarle el abasto de electricidad a la costa noreste del país al sur, que depende 80 % de ellos para su abasto eléctrico. Lo bueno es que para los mitines en el Zócalo no tiene defensa posible… . Magú en La Jornada.