El 20 de enero, tomará posesión Donald Trump como 47.º presidente de los Estados Unidos. Pero… No invitó a Claudia Sheinbaum ni a Justin Trudeau. Esto es porque se considera un evento protocolario de política interna y no es común que se invite a presidentes o primeros ministros de otros países. Solo Carlos Salinas visitó a Bill Clinton antes de su toma de posesión y fue el primer presidente extranjero en reunirse con él ya como presidente, pero tampoco fue convocado a la ceremonia. El protocolo pide invitar al embajador de México en Washington, Esteban Moctezuma y ya. Él llevará la representación. Si bien el presidente electo, Donald Trump, modificó el protocolo al extender invitaciones a los presidentes de Ecuador, Argentina, El Salvador y la primera ministra de Italia, esta decisión obedece a una afinidad del nuevo mandatario norteamericano por los gobiernos de derecha. Además, como señala Horax en Milenio, si se trata de “representar” al “narcogobierno mexicano” (que dice Trump que tenemos), El Mayo o el Chapo pueden cumplir el rol adecuadamente. Pero no les crean. Es por mero protocolo, no porque el misógino xenófobo no nos quiera…