Que uno de los pretextos para votar la reelección de Rosario Piedra Ibarra en la Comisión Nacional de Derechos Humanos es porque era “un regalo de cumpleaños para Andrés Manuel López Obrador”, que cumplió el mismo día de la elección. El otro motivo, el que verdaderamente hizo que el expresidente impulsara esta figura, es que fue la presidenta de la CNDH que menos recomendaciones hizo al Ejército. Incluso, en la primera masacre este sexenio, salió a defenderlos: que era culpa de los de las víctimas, que no separaron cuando el Ejército les ordenó detenerse. Con razón salió mal evaluada y con razón llegó al cargo no por palancas, sino por Palenque. Horax en Milenio.