
Hoy termina el gobierno de Andrés Manuel López Obrador e inicia el de Claudia Sheinbaum Pardo. Recibe un país lleno de focos rojos, en especial en temas de seguridad, salud y educación, aunado a la corrupción e impunidad. Además de los riesgos del cambio climático, los potenciales ajustes de políticas en EE. UU. tras su próxima elección y una posible recesión global. Pero lo bueno es que tiene la pieza clave de la estrategia de la 4T: culpar a Felipe Calderón de todo lo que está mal, salió mal y saldrá mal. Porque ellos todo lo hacen bien, el país va bien y son un éxito. Horax en Milenio.