No se preocupen mucho: los primeros siete nombramientos de la presidenta electa le dieron buena prensa: salvo Ernestina Godoy, se recibieron bien, serios y profesionales, con estudios y experiencia y con un perfil propio. Pero preocúpense mucho: la agenda entre ambos no parece ser muy distinta. En parte, porque vienen de un mismo movimiento. Pero en parte —también— porque ella es apenas virtual presidenta electa, el Tribunal Electoral aún no confirma su elección. Y el presidente saliente ha dado claras muestras de que no quiere salir del todo. Y ella, al quererle dar gusto —o al no pretender confrontarse aún— le da por su lado. Así, declaró que —contrario a la ley y al acuerdo con la oposición— la Guardia Nacional se adscribirá a la SEDENA y no tendrá mando civil. No, pues sigamos así, militarizando al país (por parte de la izquierda) y diciendo que no es militarización, sino «segundo piso de la cuarta transformación»; y que se hace para evitar la corrupción y los malos manejos. No, bueno. Perujo en El Economista.