Pues no hay plazo que no se acabe. Y hoy termina la gestión de Agustín Carstens al frente del Banco de México. Sus casi diez años al frente de BANXICO nos llevaron a tener estabilidad de precios y un peso relativamente fuerte, a pesar de ciertas fluctuaciones normales. Veremos si, ahora que se retira, padecemos mucho o poco la «falta de cobertura» que ofrecía «el Gordo de Oro». Le deseamos éxito en sus nuevas tareas. Alarcón en El Heraldo.
