Pues empezamos el año con la entrada en vigor de las nuevas reformas aprobadas: la Energética, la Hacendaria, y la Política, que se suman a la Educativa, de Telecomunicaciones y Laboral, que ya estaban vigentes. Dicen que la única que falta, la verdadera madre de todas las reformas, es la Ley de Herodes. Y que los «regalitos» van, ya no vienen. Por aquel refrán de «con la Ley de Herodes, o te chingas o te jodes» -que ya habíamos comentado, de otra forma, el 3 de enero-. Villafuerte en Milenio, en su primera aparición en Monoaureo.
