Desde el viernes pasado, un grupo de alumnos del CCH tomaron la torre de Rectoría y destruyeron mobiliario y archivos. ¿Y cuál fue la respuesta del Rector? «Agotar la vía institucional, empezar a reunir elementos para presentar una querella ‘contra quien resulte responsable’, y negarse a dialogar en tanto no haya condiciones mínimas…» O sea, nada. Porque, eso sí, hay que privilegiar la autonomía universitaria: nada de entrada de la fuerza pública. Con razón se saben impunes. Calderón desde su sitio.

Pingback: La levedad de las respuestas | MonoAureo