De acuerdo al cable 1976MEXICO10067_b de Wikileaks, Estados Unidos consideró como posible el rumor de que Luis Echeverría hiciera asesinar al presidente electo José López Portillo después del 1 de septiembre -ya que hubiera entrado el nuevo Congreso- a fin de alargar su propio mandato o bien poner un «interino» a modo que fuera más manejable que López Portillo e incluso analizó las opciones al respecto. Lo que recuerda la célebre frase de Echeverría: «… esta medida ni nos beneficia ni nos perjudica, sino todo lo contrario.» (y también nos recuerda aquella de «¿La Chimoltrufia le maneja el Teleprompter?«). En otro cable de Wikileaks de 1973, el 1973MEXICO04113_b el propio López Portillo, a la sazón recién nombrado Secretario de Hacienda y Crédito Público reconocía que «no era experto en finanzas (…) por lo que podría cometer errores (…) pero que tenía un gran equipo en quién confiar». Si, lo notamos… ¿Y si Echeverría hubiera cumplido su perverso plan, nos habríamos ahorrado las crisis de 1976 y 1982? Es pregunta. Paco Calderón desde su sitio.

Al respecto, comenta López Dóriga en su columna de hoy: «… lo sucedido durante la crisis de finales de 1976, cuando se daba como un hecho el autogolpe de Estado de Echeverría, fijado para el 20 de noviembre, a diez días de la toma de posesión de López Portillo, rumor que cundió hasta vaciar anaqueles de supermercados. En aquel ambiente y en aquellos días, Echeverría citó a su gabinete en Los Pinos a los dirigentes del PRI y al mismo López Portillo, y en una reunión cargada de emociones, reveló que su vida corría peligro y que si lo mataban, asumiera la Presidencia el general Hermenegildo Cuenca Díaz, su secretario de la Defensa Nacional, con el compromiso de que el 1 de diciembre entregara la banda presidencial a López Portillo.»
El texto completo está en http://www.milenio.com/cdb/doc/impreso/9177460