Pues nada, que la Corporación Disney anunció la compra de Lucasfilm LTD, que entre otras cosas es dueña de la saga La Guerra de las Galaxias, siete películas y una serie de productos de merchandaising derivados de ella que por más de treinta y cinco años nos hizo soñar en «una galaxia muy muy lejana», y que ahora será un «mágico mundo de color». Por lo pronto, anunciaron el lanzamiento del Episodio 7 para 2015, y sospechamos que en lugar de efectos visuales o edición de sonido, estará postulada para el Premio Óscar por mejor canción original y mejor soundtrack… pero de su esencia de «futuro usado», «taoísmo aplicado», «pietaje original dela Segunda Guerra Mundial refilmado» o «tragedia griega futurista», poco le quedará. Nerilicón en El Economista.
