El presidente Calderón tiene razón: la violencia está causada, principalmente, por los criminales. Y a ellos hay que reclamarles. ¿Pero qué hacemos si son como los agentes del Instituto Nacional de Migración, que a los detenidos en lugar de entregarlos a las estaciones migratorias los vendían a los delincuentes? Helguera señala que son el enemigo en casa… y tiene razón. Cartón de «La Jornada».
